Vestida con un uniforme de enfermera y guantes plásticos, las autoridades dicen que “la Diosa” montó su negocio en el Motel 6 de Dania Beach. Era mayo del 2009. Ofreció sus servicios —inyecciones para las nalgas— por $3,000 a $ 4,000 por cliente.Allí, según las autoridades, la Diosa —más conocida por otras víctimas como la “Duquesa”, y cuyo verdadero nombre es Oneal Ron Morris— inyectaba las nalgas de sus pacientes con una mezcla tóxica almacenada en una botella de Pedialyte. Morris les aseguraba que era silicona.
A los pocos meses, las mujeres se enfermaron severamente, y una de ellas sufrió una obstrucción pulmonar que estuvo a punto de matarla.
El lunes, las autoridades arrestaron a Morris una vez más. Ella encara ya múltiples cargos por usar una mezcla de Fix-a-Flat, superpegamento y aceite mineral para agrandar las nalgas de las mujeres en Miami Gardens, dejando a sus antiguas clientas enfermas y desfiguradas.
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