El cólera se apodera de las cárceles cubanas

La provincia, que se ubica en el centro de Cuba, enfrenta un brote de cólera, apenas meses después de superar una epidemia de dengue que aún afecta a la región.

 Según el grupo HablemosPress, las cárceles más afectadas son la provincial Kilo 7, la prisión de máxima seguridad nacional Kilo 8 y la prisión Kilo 9, que está declarada oficialmente en cuarentena.

Sin embargo, las cifras exactas de enfermos se desconocen, pues el régimen cubano las mantiene celosamente bajo hermetismo.

Incluso el uso de la palabra "cólera" para referirse a la enfermedad está prohibida para los periodistas que trabajan en medios oficiales cubanos, señaló la disidencia cubana. Calixto Ramón Martínez, reportero independiente de la agencia independiente Hablemos Press, se encuentra encarcelado desde septiembre bajo acusaciones de "desacato" por informar sobre el tema.

En medio de este desolador escenario, los reclusos corren el riesgo de contagiarse o de morir por la enfermedad, al tiempo que resultan insuficientes y arbitrarias las medidas epidemiológicas que se vienen tomando.

La disidencia indicó que las restricciones en el abastecimiento de agua se suman a la falta de exigencia y control de la higiene en la elaboración y manipulación de los alimentos que se sirven en las hacinadas cárceles cubanas.