La libertad de expresión tiene su límite

El nieto del dictador Rafael Leonidas Trujillo, y vicepresidente de la fundación que lleva el nombre, Ramfis Domínguez Trujillo, consideró como “vergonzosa” e irrespetuosa de la libertad de expresión de parte de las distintas agrupaciones antitrujillistas al intentar recabar firmas para obligar al procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito a aplicar las prohibiciones de promoción a Trujillo.

“Ya es hora de exigir pruebas perentorias de todas las declaraciones que pretenden difundir como historia patria. En este mismo tenor, propusimos y ahora insistimos en la realización de un debate público esclarecedor, en el lugar y medio que escojan estos grupos, con un versado intelectual que seleccionen estos señores que hoy aborrecen y niegan las virtudes de la Era de Trujillo”, consideró en documento enviado desde Miami, donde opera su fundación.

Manifestó que los grupos que denominó neo-antitrujillistas articulan  que la libertad de expresión tiene sus límites en el respeto a la verdad y el derecho a la dignidad de las personas “obviando deliberadamente los elementos de nuestra jurisprudencia que protegen este derecho conforme las disposiciones que sancionan la difamación y la injuria”.

“Sin embargo, es comprensible que ante el extraordinario peso de las verdades expuestas por esta organización, prosigan censurar esta información en vez de enfrentarse a duras realidades comprometedoras que desdicen fuertemente de su desvirtuada labor”, añadió.

Insistió sobre lo que consideró la necesidad que de cara a la nación existe de hacer un gran debate, al entender que cada quien tendrá la oportunidad de exponer y defender su tesis sobre cualquier tema inherente a la denominada era de Trujillo, y el pueblo a su vez, podrá evaluar lo que realmente significaron para el país los 30 años de la Era de Trujillo”.

“Ante nuestra solicitud de organizar este debate histórico, estos grupos solo han procurado desacreditar nuestra propuesta, cuestionando nuestra capacidad y organizando sus propios coloquios que solo persiguen mantener su vigencia con exposiciones retorcidas y parcializadas, desafiando así también el derecho a la información”, dijo.