Durante el acto sexual, cuando sientas ese hormigueo que te indica que pronto te vendrás (eyacularás), detente, respira, acaricia a tu pareja, que te acaricie a ti y cuando sientas que todo está bajo control, continúa. Esto lo puedes repetir varias veces para prolongar más el placer.
Observa
Cuanto sientas que te vas a venir también es oportuno que te detengas a observar a tu pareja detenidamente, disfruta de recorrer con la mirada cada rincón de su cuerpo, enfócate en eso que te enamoró; tal vez esos lindos hoyuelos, o ese lindo huesito de la cadera, o qué tal esas pompas redondas que tanto te gustan.
Presiona el glande
Este es un secreto de la "abuela coca-cola" "¿por qué no?". Cuando estés a punto de alcanzar el clímax has que tu pareja te de un pequeño masaje en el glande, con su dedo pulgar en la parte inferior y el índice en la superior, un poco de presión y listo, detendrás la eyaculación. Esto lo puedes hacer tú mismo. Cada masaje debe durar 10 segundos y lo puedes repetir en 3 ocasiones por sesión de sexo.
Jala los testículos
Cuando un hombre va a eyacular sus testículos se "encojen" un poco y parece que se acercan más al cuerpo, es el momento indicado para tirar de ellos, pero con suavidad, así retrasarás la eyaculación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario